¿Conoces a Rick y Chumlee? ¿Has visto alguna vez el programa de History Channel El Precio de la historia? Si la respuesta es sí, seguramente te harás una idea del tema que vamos a tocar a continuación. De lo contrario, no te preocupes, pronto lo descubrirás.
El precio de la historia es un exitoso programa que nació en 2009 y que destaca por las cómicas peleas entre jefes y empleados y especialmente, por los objetos que llevan a la tienda. Puedes encontrar juguetes antiguos, arte, instrumentos tocados por famosos e incluso armas de guerras de todo tipo.
Pero más allá del espectáculo televisivo, lo que ese programa muestra es el día a día de una casa de empeños. De ahí la pregunta que siempre se hacen antes de comenzar cada negociación: ¿Quiere vender o empeñar?
Una casa de empeños es un negocio al que las personas acuden cuando necesitan dinero en efectivo de manera inmediata, a cambio de un bien que se conoce como prenda.
Existen dos tipos de casas de empeño. Las generalistas, que aceptan todo tipo de objetos, como una motocicleta, una bicicleta, electrodomésticos o joyas; y las que se dedican a recibir algo en concreto, por ejemplo, oro.
Ambos operan de la misma forma. Tasan la prenda y te pagará una cantidad a cambio. La peculiaridad de este tipo de negocio es que tú puedes regresar y recuperar el objeto pagando el dinero prestado y los intereses pactados, que suelen ser bastante altos. De lo contrario, el negocio lo pondrá a la venta y tendrá un beneficio adicional por esa vía.
Por ese motivo es importante que siempre tengas un contrato que respalde la operación y que muestre claramente las condiciones del negocio, entre ellas, tasa de interés, plazo y costo para recuperar el bien o fechas de pago. Sin embargo, para evitar problemas, lo más aconsejable es buscar la solución a tus problemas financieros en instituciones reguladas.